Igual que otros animales, los perros utilizan sus cuerdas vocales para comunicarse con el mundo que les rodea, incluidos sus propietarios. Sin embargo, es difícil saber qué es lo que intentan transmitir cuando lo hacen. ¿Quieren comida o atención? ¿Se trata de un hábito instintivo o necesitan comunicarnos algo? Aunque no siempre podemos saber porqué aúllan nuestros perros, hemos enumerado algunas de las principales razones por las que lo hacen y las medidas que puedes tomar para aliviarlo.
Ansiedad por separación
Si has notado que tu perro ha empezado a aullar en exceso recientemente o si los vecinos te han alertado de que últimamente tu pero aúlla cuando estás fuera de casa, podría ser un claro indicio de que tu perro está sufriendo ansiedad por separación. Los perros son animales sociales y, del mismo modo que nosotros, pueden sentirse solos si están sin compañía durante mucho tiempo. Si crees que tu perro puede estar sufriendo ansiedad por separación, puedes afianzar esa idea si además tiene un comportamiento destructivo, hace sus necesidades en casa y lo notas deprimido. Una medida útil para evitarlo es dejarlo a solas en periodos de tiempo que vayan aumentando gradualmente. Otra opción es buscar un cuidador en Gudog y así asegurarte de que tu perro estará atendido, cuidado y en compañía cuando tú estés fuera de casa.
Atención
Aunque tu perro no sufra ansiedad por separación, a veces puede aullar para llamar tu atención. Como animales de manada que son, esta es una práctica habitual: tu perro puede empezar aullar cuando llegas a casa, o cuando ve que coges su correa o cuando sale a pasear. Estos ladridos de excitación no son más que una manera de comunicarse contigo.
Es importante que, en la medida de lo posible, dediques tiempo de calidad a tu perro: ejercicio, mimos y mucho tiempo de juegos que hagan que se estimule tanto mental como físicamente.
Sin embargo, si crees que tu perro está aullando de forma excesiva, hay técnicas de adiestramiento que pueden ser útiles. Como por ejemplo, premiarle con una golosina cuando deje de aullar.
Entorno
Es posible que hayas detectado que tu perro ladra al oír sirenas o sonidos agudos en su entorno. Como ya sabrás, los perros evalúan constantemente su alrededor, su entorno, y están siempre alerta a este tipo de ruidos.
Con el tiempo, es normal que los perros se desensibilicen a los sonidos cotidianos de tu zona, pero si esto persiste y crees que puede estar estresado, puedes probar con distraerle. Por ejemplo, con juegos divertidos para él como «busca». O quizá puede resultarte útil exponerle a estos sonidos en un entorno en el que se sienta seguro y por supuesto con tu compañía. Esto no es fácil de conseguir ya que requiere mucha constancia y perseverancia.
Sueño
Como nosotros, los perros reaccionan físicamente a sus sueños y pueden aullar, ladrar, gemir, quejarse, y el tan común movimiento de cola y patas. Por ello, no debería ser preocupante si tu perro aúlla en sueños y de forma puntual. Sin embargo, si tu perro siente una ansiedad excesiva o recrea sonidos constantes de miedo o dolor cuando está durmiendo, lo más recomendable es visitar al veterinario.
Problemas médicos
La última causa, y también la más grave, sería que tu perro aúlle por un problema médico. Si los aullidos de tu perro son constantes, y ya has podido descartar las razones anteriores, sin duda es el momento de consultar al veterinario para que le realice un chequeo.
Los aullidos excesivos pueden ser irritantes, pero en general no son motivo de preocupación. Lo importante es tratar de identificar la causa subyacente para poder aplicar medidas sencillas que modifiquen el entorno o ayuden a aliviar el estrés que pueda sufrir nuestro perro.